Os traigo una forma de comer spaguetti un poco más vistosa , no tiene nada de complicado, son unos spaguetti con salsa de tomate casera, una berenjena y un poco de queso (si no os gusta, prescindid de él)
Si no tenéis tomate casero o no queréis hacerlo, podéis usar tomate frito comprado o usar restos de spaguetti del día anterior, os quedará una riquísima receta de aprovechamiento.
Con éstas cantidades salieron 6 rollitos.
Cuando hice ésta receta pensé que había descubierto la pólvora, que era una receta novedosísisima pero noooooo, después de hacerla, escribirla y guardarla en borradores, vi algo parecido por Internet así que ya está requeteinventado, ¡¡que chasco!! ¡¡no soy nada original!! jajajajaja, aunque la mía no es igual pero es similar, ainsssssssssss
- una berenjena (270 grs.)
- 50 grs. de spaguetti
- queso mozzarella rallado
- salsa de tomate casera
- tomillo (optativo)
- sal
- aceite de oliva
Laminamos la berenjena longitudinalmente (yo la he pelado previamente con un pelapatatas), echamos un poco de sal por encima y dejamos que suden. Ponemos los spaguetti a cocer en abundante agua con un chorrito de aceite de oliva y un poco de sal, una vez cocidos los mezclamos con la salsa de tomate (a la que he añadido una pizca de tomillo en polvo ), reservamos
Hacemos las láminas de berenjena en una sartén ancha con un hilo de aceite hasta que se doren por ambos lados, las extendemos en una fuente llana, en mi caso era una berenejena pequeña, así que junté de dos en dos láminas para hacer los rollitos, colocamos un puñado de spaguetti en el centro y enrollamos, echamos queso mozzarella por encima y gratinamos en el grill del microondas o en el horno, hasta que el queso esté dorado
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