Es una tarta elaborada en dos pasos y parece más complicada de lo que es, realmente solo es una base de bizcocho de yogur de chocolate y una crema hecha con el queso, la he cubierto con una mermelada de mandarinas y está ¡¡requetebuena!! , si no la hacéis, os vais a arrepentir de no poder saborearla jajaja
Quiero dedicar ésta tarta a dos compis bloggeras, simpatiquísimas y un cielo de mujeres, me hacen reír y paso unos ratos muy agradables con ellas, me dicen que estoy locuela pero se que es con cariño, jijijiji, además, no se quien estará más locuela de las tres, ellas son.................................... tachánnnnnnn
Loli (Mi Alacena) y
Yoli (Para gustos, los sabores), chicas, aunque engorda que se mata ¿queréis un trocitooooooooo?, muchas gracias por esos ratitos que me dais, la vida con sonrisas es mucho mejor.
Para el bizcocho:
- 3 huevos
- un yogur de chocolate o uno tipo Dalky
- 2 medidas de yogur de azúcar
- 3 medidas de yogur de harina (yo le echo solo 2 y 1/2)
- un sobre (16 grs.) de levadura en polvo
- una medida de yogur de aceite de oliva (yo le echo solo media medida)
- un poco de licor de naranja (optativo)
- 3 cucharadas soperas de Nesquik
Para la crema de queso Philadelhia con chocolate:
- 6 hojas de gelatina neutra
- 200 ml. de leche
- 2 yemas de huevo
- 125 grs. de azúcar
- una cucharada sopera de azúcar vainillado
- dos tarrinas (300 grs.) de queso Philadelphia con chocolate Milka
- 400 ml. de nata para montar
- 5 cucharadas soperas rasas de Nesquik
- mermelada de mandarina para cubrir la tarta
- mantequilla y harina para el molde
Hacemos primero el bizcocho.
Batir con las barillas de la batidora eléctrica los huevos con el azúcar, no incorporando el siguiente hasta que no esté bien mezclado el anterior, añadir el yogur, seguir batiendo, echar el aceite y el licor poco a poco sin dejar de batir, añadir la harina tamizada con la levadura y mezclada con el Nesquik, mezclar muy bien la masa.
Untar un molde desmontable (el mío es de 26 cm. de diámetro) con mantequilla y espolvorear un poco de harina por encima, echar la mezcla del bizcocho y hornear a horno precalentado a 180ª de 35 a 40 minutos, dependiendo de cada horno, probad con un palillo.
Con éstas cantidades sale un bizcocho gordito, y como me parecía demasiado para una tarta, lo corté por la mitad longitudinalmente y lo congelé en un tupper que tengo redondo, también podéis comerlo para desayunar o merendar o hacer la mitad de las cantidades y os saldrá un bizcocho más bajo pero, de esa forma y si usáis el tamaño de molde que usé yo, deberá estar algo menos de tiempo en el horno.
Como vamos a usar el molde desmontable para hacer la tarta completa, una vez que esté hecho el bizcocho, desmoldar y, os cuento como lo hago yo, una vez desmoldado, pongo el bizcocho en la bandeja o plato donde voy a servir la tarta, vuelvo a poner el aro del molde desmontable y cierro el molde con el bizcocho dentro, como se ve en la foto, y luego, procedo a añadirle lo que falta
Ahora hacemos la crema:
Poner las hojas de gelatina a remojo en agua fría, mientras, calentar a fuego suave la leche con las dos yemas, el azúcar y el azúcar vainillado, remover con barillas, añadir las hojas de gelatina escurridas, remover bien, añadir el queso con chocolate, remover y separar del fuego, dejar templar, si véis que no queda bien mezclado el queso, podéis usar la batidora para conseguir una mezcla más homogénea.
Montar la nata con el Nesquik, cuando la crema de queso esté templada, incorporar la nata con movimientos envolventes y echar la mezcla encima de la base de bizcocho, guardar en la nevera hasta que esté bien cuajado.
Pasado el tiempo, añadir la mermelada por encima, quitar el aro del molde y servir
Podéis congelar ésta tarta y cuando queráis comerla, la sacáis el día anterior a la nevera y, al día siguiente, estará lista.