Me he aficionado a usar la sopa de cebolla en algunos platos, como en el pollo asado que os he puesto en la anterior receta, me había sobrado un poco y pensé que le podía dar un toque muy bueno a las cremas así que, dicho y hecho, lo probé en una crema de calabacín y queda buenísima.
Aparte de eso he cambiado alguna cosa de como lo hacía habitualmente, he puesto el calabacín sin pelar (bien lavado) y he añadido queso en crema semi-curado, así que os dejo con una crema estupenda para entonar el cuerpo con éste frío, lluvia y viento que estamos teniendo.
- 800 grs. de calabacín
- 300 grs. de patata
- 2 zanahorias medianas
- media cebolla
- 2 dientes de ajo
- dos cacitos de caldo de pollo Knorr
- queso en crema semi-curado al gusto
- nata o crema ligera
- una cucharada sopera colmada de sopa de cebolla
- una cucharada sopera de mantequilla
- una cucharada sopera de aceite de oliva
En una cazuela, poner la mantequilla y el aceite, añadir, la zanahoria, la cebolla y los dientes de ajo pelados y troceados, rehogar unos minutos, hecho ésto añadir el calabacín muy bien lavado y la patata troceados, cubrir con agua, tened cuidado de no echar mucha porque el calabacín también suelta agua, solo cubrir lo justo, si luego fuera necesario, podéis añadir más, añadir la sopa de cebolla, los cacitos de caldo y dejar al fuego hasta que esté todo cocido, cuando pase el tiempo, echar un poco de nata y queso en crema al gusto, batir todo el conjunto hasta obtener una crema y ya podéis disfrutar de una crema calentita y sabrosa, acompañada con picatostes está de vicio.
Si os sobra podéis congelarla en unos tuppers y así tenéis un primer plato ya preparado para otras ocasiones
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