Hace mucho que hago ésta tarta, ya la publiqué en el 2009, de eso ya hace tiempo ¿verdad?, ahora os la vuelvo a poner algo "renovada" porque es una tarta que merece la pena por lo rica que está, antes usaba para la base sobaos comprados pero, ésta vez he hecho el sobao pasiego casero para la base con la receta de
Sobao Pasiego que publiqué hace un tiempo y, ¡¡que os voy a decir!! ¡¡es una delicia!!, no es nada empalagosa
La foto no hace honor al sabor tan estupendo que tiene, para mi, es la tarta de queso 10, buenísima, espero que os guste tanto como a mi, no dejéis de probarla porque merece la pena.
Para el sobao pasiego:
- 2 huevos grandes
- 165 grs. de azúcar
- 165 grs. de mantequilla en pomada
- 165 grs. de harina de repostería
- la ralladura de un limón (sólo lo amarillo)
- una cucharada sopera de anís
- un sobre de levadura en polvo, tipo Royal
- una pizca de sal
Para la mousse de queso:
- 5 ó 6 hojas de gelatina neutra (he usado Hacendado, cada lámina pesa 1'66 grs.)
- 200 ml. de leche
- 2 yemas de huevo
- 150 grs. de azúcar
- 1 cucharada sopera rasa de azúcar vainillado
- 300 grs de queso crema
- 400 ml. de nata para montar
- 3 cucharadas de zumo de limón
- mermelada de arándanos para cubrir la tarta (he usado La Vieja Fábrica Cocina Selecta)
- mantequilla y harina para untar el molde
Para hacer el sobao echar la mantequilla en pomada en un bol y batir, añadir los huevos de uno en uno, batir muy bien la mezcla, añadir el azúcar, la ralladura, el anís y la pizca de sal, batir el conjunto, añadir la harina tamizada con la levadura, volver a batir hasta obtener una mezcla homogénea.
Echar la mezcla en un molde desmoldable (26 cms. de diámetro) untado con mantequilla y espolvoreado con harina , hornear a horno precalentado a 180 º de 20 a 25 minutos, sacad del horno y dejar enfriar.
Cuando esté frío desmoldar el sobao de la base del molde, lo colocamos en el plato o bandeja donde vayamos a servir la tarta y, volvemos a poner el aro desmoldable alrededor de la base la tarta para echar luego la mousse encima y que cuaje perfectamente sin que se desmorone.
Si os parece que queda muy gruesa la base de sobao, cortar por la mitad o haced la mitad de las cantidades o aumentad la cantidad de mousse de queso.
Para la mousse de queso ponemos las hojas de gelatina en remojo con agua fría, mientras, poner en un cazo al fuego la leche con el azúcar, el azúcar vainillado y las dos yemas, remover a fuego suave, incorporar las hojas de gelatina escurridas, remover bien, añadir el queso y el zumo de limón, seguir removiendo hasta mezclar todo muy bien, separar del fuego y dejar templar, si veis que el queso no queda bien mezclado podéis batir la mezcla con la batidora hasta que quede homogéneo, montar la nata y añadir a la crema de queso con movimientos envolventes, echar encima de la base de sobao que habíamos dejado dentro del molde desmontable, dejar unas horas en la nevera (mejor de un día para otro) para que cuaje bien, una vez que haya cuajado, cubrir con la mermelada de arándanos y desmoldar.
Ahora podéis disfrutar de una tarta exquisita, no os defraudará en absoluto.
Si os sobra, la podéis congelar, la partís en porciones, la metéis en tupper y, el día anterior la sacáis y la ponéis en la nevera para que se descongele, estará igual de rica que cuando se hizo.